Una palabra sobre la vida y las cosas


           

 

El juez

        En un pasado no muy lejano, nuestros jueces eran hombres y mujeres temerosos de Dios que juzgaban a las personas según las leyes del país. Hoy en día, muchos jueces emiten juicios basados ​​en sus creencias políticas o en las leyes de otras naciones. Dios dijo que tengan cuidado con lo que están haciendo, porque no juzgan por el hombre sino por el Señor, que está con ustedes en el juicio.

      Todos somos Jueces de una forma u otra. Juzgamos a las personas según la ropa que visten, su forma de hablar, su forma de peinarse o el color de su piel. Si chismeamos sobre alguien, lo estamos juzgando por las palabras que decimos. Es tan fácil hablar de otra persona y no ver los defectos en nosotros mismos. Dios habla de ver la paja en otra persona y no ver la viga en nuestro propio ojo.

      No estamos en esta Tierra para ser jueces, estamos aquí para hacer la voluntad de nuestro Padre Celestial. Llegar a los demás y llevarlos a Jesús. No estamos para juzgar a nadie. No se nos ha dado esa autoridad. Sólo Dios es el Juez de toda la humanidad. Dios juzgará a todos, y Su Juicio comienza primero en Su Casa. Los primeros en ser juzgados son los Predicadores y Maestros. ¿Estamos enseñando la Palabra de Dios o estamos enseñando lo que la gente quiere escuchar? El Juicio de Dios se basa en Su Palabra. Nuestro Dios es un Dios Justo y Su Juicio es Verdadero. ¿Nos someteremos a Él ya la salvación que Él ha provisto? Jesús es nuestro Salvador y Señor. Él es el único camino para entrar al cielo. Jesús es nuestro Abogado entre nosotros y el Padre.


      Nueva versión King James
2 Crónicas 19:6 y dijo a los jueces: Mirad lo que hacéis, porque no juzgáis por hombre, sino por Jehová, que está con vosotros en el juicio.
 7 Ahora pues, sea con vosotros el temor de Jehová; cuidaos y hacedlo, porque en Jehová nuestro Dios no hay iniquidad, ni acepción de personas, ni aceptación de cohecho.
 8 Y en Jerusalén, para el juicio del SEÑOR y para las controversias, Josafat designó algunos de los levitas y sacerdotes, y algunos de los principales padres de Israel, cuando regresaron a Jerusalén.
 9 Y les mandó, diciendo: Así haréis en el temor de Jehová, fielmente y con corazón leal:
 10 "Cualquier caso que te suceda de parte de tus hermanos que habitan en sus ciudades, ya sea de derramamiento de sangre o transgresiones contra la ley o el mandamiento, contra estatutos o ordenanzas, les advertirás, para que no se rebelen contra el SEÑOR y la ira venga sobre ti y tus hermanos Haz esto, y no serás culpable.

      Nueva versión King James
Lucas 6:42 "¿O cómo puedes decir a tu hermano: 'Hermano, déjame quitarte la paja que está en tu ojo', cuando tú mismo no ves la viga que está en tu propio ojo? ¡Hipócrita! Primero quita la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.